Existe un refrán que dice, «nunca tendrás una segunda oportunidad para causar una buena primera impresión». Cuando una empresa está tratando de atraer nuevos clientes se hace mucho más cierto. Frecuentemente, la primera impresión de un cliente se basa en el aspecto y la apariencia de un negocio o instalación. Es obligatorio que la empresa, negocio, oficina, tienda, hotel… luzca lo mejor posible cuando los potenciales clientes entren en ella. Es importante mantener un negocio ordenado y organizado y de aspecto profesional. Al crear un espacio cómodo, limpio y acogedor, está ayudando a dar a los clientes una actitud positiva hacia su negocio.
El primer paso para crear un entorno atractivo para los clientes es centrarse en la limpieza. Porque no solo el lugar de trabajo debe estar bien organizado y libre de desorden, sino que los suelos y muebles deben encontrarse limpios. Si su negocio está cubierto de alfombras o moqueta, debe limpiarlo profesionalmente con regularidad. Ello asegurará que sus alfombras o moqueta no solo tengan el mejor aspecto, sino que también estén libres de olores desagradables y por supuesto eliminar los temidos ácaros. Mantener un ambiente limpio y fresco comienza con los pisos limpios. Por supuesto que, además, es importante aspirar 3-4 veces por semana, o más, dependiendo de la cantidad de tráfico en su negocio, pero ello no será suficiente y necesitará ayuda profesional al menos dos o tres veces al año.
Como hemos mencionado anteriormente, el mantenimiento de los muebles es otro factor a destacar. Así, si dispone de sillones y sillas, las tapicería deben mantenerse limpias y libres de manchas para mantener una apariencia profesional.
Cuando un cliente hace un juicio sobre un negocio, es probable que tenga en cuenta el aspecto físico del mismo. Al mantener las instalaciones limpias y organizadas, está haciendo que su negocio sea más deseable para los clientes y que se sientan cómodos, al tiempo que aumentará la satisfacción del cliente y aumentarán las probabilidades de que vuelvan.